Podría pasarme horas hablando de Cuba y dándote miles de razones para visitar esta incríble isla que tanto disfruté. Tengo la suerte de haber viajado mucho y haber visto muchos lugares increíbles y sin duda Cuba se convirtió en uno de mis favoritos y guardo un recuerdo muy especial, pocos sitios me han llenado y emocionado tanto como este. Es un país que marca y que tiene algo que engancha, un sitio al que creo que todo el mundo debería ir al menos una vez en la vida. Hice este viaje con 3 amigas y todas volvimos igual de encantadas y maravilladas, al principio nos sorprendia que cada vez que conocíamos a alguien nos preguntaban si era nuestra primera vez en Cuba o estábamos repitiendo y tras dos semanas entendimos porque la gente siempre repite.
Cuba es un país que tiene de todo: naturaleza, playas paradisíacas, historia, monumentos, gente lena de bondad y alegría que te hace sentir bienvenido, buena comida y buena música. La isla se puede conocer de muchas maneras, aunque mi consejo es vivirla desde dentro, alójate en casas de cubanos, ve a comer sus restaurantes (Paladares), trasládate con conductores locales y baila, baila mucho en cada una de sus Casas de la Música. Los lujos los vivirás en los cayos, pero el resto vívelo desde dentro, te aseguro que no te arrepentirás.
- Días 1-3: Habana
- Días 5 y 6: Viñales
- Día 7: Cienfuegos
- Día 8: El Nicho y Trinidad
- Días 9 y 10: Trinidad
- Día 11: Santa Clara
- Día 12: Cayo Coco
- Día 13: Cayo Guillermo
- Día 14: Varadero
- Día 15: Habana
Habana
La Habana es una ciudad muy única en la que te puedes quedar durante días y días disfrutando de sus coloridas calles, su música, arte, historia y su gente. Es un lugar para pasear y observar sus contrastes, aprender, hablar con la gente por las calles, tomar ron en sus bares al son de voces increíbles y todo tipo de instrumentos y bailar mucho.

Una de las zonas más emblemáticas es la Habana Vieja, con sus coloridas calles de estilo colonial, llenas de historia y de vida. Muy cerquita se encuenta Centro Habana, una parte en la que se aprecia más la vida local y el día a día de los cubanos, podrás visitar el capitolio y pasear por la bonita venidad de Jose Martí. Al final de esta avenida te encontrarás con el Malecón, otra de las zonas protagonistas, perfecta para ver el atardecer con un ron cubano.
La Habana está llena de historia y arte, durante tu estacia podrás volver atrás en el tiempo en el Museo de la Revolución y disfrutar de la musica y el ritmo cubano en muchos de sus bares con música en directo mientras pruebas los famsos mojitos y daiquiris. En este post te cuento todos los detalles de lo que puedes hacer en la Habana en 4 días. Nosotras dividimos nuestra visita en dos partes, pasamos 2 días en la Habana a la llegada a Cuba y otros dos al final de nuestra ruta.
Viñales
Llegamos a un pueblo con mucha personalidad, situado en medio de un valle, el lugar perfecto para disfrutar de la naturaleza.

Viñales es famoso por su valle y sus mogotes, unas montañas con una forma muy característica típicas de la zona. El valle ofrece diferentes actividades y recorridos que podrás hacer a caballo, caminando o en bicicleta, hay opciones para todos los gustos. Pese a ser un pueblo pequeño tiene mucho ambiente y cosas para hacer. Es un sitio muy diferente a cualquier otro que visites en Cuba, sin duda merece una visita. En este post te cuento todos los detalles de lo que puedes hacer aquí durante 2 ó 3 días.
Cienfuegos
En Cienfuegos pasamos sólo un día, pese a que no pudimos exprimir mucho la ciudad pudimos ver lo más emblemático ya que no es una ciudad muy grande y se recorre fácilmente a pie. Llegamos a mediodía y llovía, así que decidimos ir a comer para hacer tiempo hasta que parara de llover. Una vez lo hizo fuimos a pasear por el malecón y seguimos caminando hasta llegar a la zona del caso antiguo, donde de nuevo nos esperaban calles llenas de coloridas casas y edificios.

Llegamos al parque de Jose Martí, el lugar perfecto para hacer una parada en tu ruta. En los alredores de la zona donde se encuentran los lugares más emblemáticos del casco antiguo, los podrás ir encontrando rodeando el paque. Justo al lado se encuentra el Palacio de Gobierno, un edifico muy bien conservado, y a unos minutos encontramos la Catedral de la Purísima concepción, la cual se caracteriza por sus colores rojos y amarillos. Seguimos caminando y nos encontramos con el bonito y azulado Museo de las Artes Palacio Ferrer y el Arco del Triunfo, construído por los obreros del pueblo en honor a la independencia cubana.

Terminamos nuestra ruta recorriendo el Bulevar San Fernando, una zona peatonal con tiendas y restaurantes que sale del Parque de José Martí y te lleva hasta el Paseo del Prado, una calle llena de edificios pastel en la que puedes ver el día a día de la gente de Cienfuegos, es su lugar de reunión, de paseo y de puntos wifi, dato muy importante para locales y turitas.
El Nicho
El Nicho es uno de los parques naturales más emblemáticos del país, famoso por sus cascadas y entorno natural. Se puede visitar desde Cienfuegos o Trinidad en una excursión de un día o también puedes visitarlo en el trayecto de Cienfuegos a Trinidad ya que pilla de camino. Esta fue la opción que nosotras elegimos, salimos por la mañana temprano hacia Trinidad y paramos para visitar el parque. El lugar consta de un recorrido señalizado, llamado «El Reino de las Aguas», en el que vas por diferentes senderos visitando las cascadas y picinas naturales. Puedes parar cuando quieras y bañarte en las picinas, el agua está fresquita pero merece la pena darse un chapuzón.

El recorrido es circular, aunque una vez llegas a la Poceta de Cristal, la última psicina natural del camino, puedes optar volver por donde viniste o continuar por una subida por la que llegarás a un mirador que ofrece unas preciosas vistas del parque. Yo recomiendo hacer esta ruta ya que verás algo diferente al volver y las vistas merecen mucho la pena.

Para llegar al parque hay que hacerlo en taxi compartido o privado, no hay opción de llegar en autobús. La entrada cuesta 10 CUC y se compra en la taquilla al llegar. Con un par de horas tienes tiempo suficiente para recorrer el lugar y darte algún baño, es una visita muy recomendable, en especial si te gusta la naturaleza.
Trinidad
Trinidad es una ciudad con mucho movimiento y con un casco antiguo muy bonito, fue declarada Patrimonio de la Humanidad por la UNESCO con lo que pasear por sus calles ya es una experiencia. El centro está lleno de tiendas de artesanía y galerías de arte y hay música en cada rincón. Nosotas pasamos allí tres días en los que dos estuvimos en Trinidad y uno fuimos a visitar Santa Clara.

El primer día lo dedicamos a callejear por el centro y visitar los lugares más emblemáticos. Como llegamos a la hora de comer, fuimos al restaurante Bata con Hache, un lugar muy recomendable con comida muy buena, casera y a buen precio. Después fuimos a la Plaza Mayor, muy bien conservada y donde ponían música por la noche y los vecinos se reúnen. Continuamos caminando hasta llegar a la Iglesia y convento de San Francisco, a cuya torre se puede subir para admirar la ciudad desde arriba. Las diferentes calles empedradas te llevarán a este lugar, de nuevo te recomiendo perderte por ellas y entrar a las tiendas, galerías y bares que te encuentres para tomar algún cocktail con ron, así pasamos la tarde hasta que cenamos por la zona y terminamos el día en la famosa Casa de la Música, donde la música en directo y el baile forman todo un espectáculo. Es al aire libre y además de numerosas mesas tiene amplia zona de escaleras, que hacen las veces de grada donde te puedes sentar a tomar algo o simplemente disfrutar de la música. Definitivamente no te puedes ir de Trinidad sin pasar por aquí.

El segundo día aprovechamos la mañana para visitar los mercadillos del centro histórico. Encontrarás varias calles llenas de puestos en lo que hay todo tipo de cosas, desde calzado y bolso hechos a mano, hasta pinturas y maracas. Si te gustan los mercadillos no te lo puedes perder. Almorzamos temprano y nos fuimos a pasar la tarde a la Playa Ancón, que se encuentra a 20 minutos de la ciudad. Fuimos en taxi particular, nos dejó en la playa y acordamos la hora de recogida en el mismo sitio. La playa tiene zonas de sombrillas y ahamacas que se pueden alquilar pero también hay zonas con plameras en las que tener sombra. Si te gusta la playa es un buen plan para la pasar la tarde, aunque es una playa más normal de ciudad, no la típica estampa caribeña de otras zonas.

Por la noche Trinidad tiene mucho ambiente, además de visitar la Casa de la Música y los numerosos bares del centro que ofrecen música en directo, si quieres algo más de fiesta deberías visitar La Cueva, una discoteca que recibe ese nombre porque está literalmente dentro de una cueva. Cada noche se llena de turistas y locales, es un ambiente más turístico del que encontrarás en cualquier otra zona. Tiene una sala muy amplia que abre hasta entrada la madrugada. Se encuentra a las afueras así que es recomendable ir en taxi.
Santa Clara
Santa Clara no nos pillaba realmente de paso en la ruta pero teníamos ganas de ir ya que es un lugar muy importante en la historia de la revolución y donde se ecuentra el Memorial y mausoleo del Che. Sin duda es un lugar en el que seguir aprendiendo de Cuba y su historia y creo que su visita se merece la pena. El memorial consta de una plaza en la que hay diferentes grabados de frases y cartas del Che, y un museo que repasa toda su vida desde que era jóven, en la que hay diferentes objetos y cartas que le pertenecían.

La ciudad es también de estilo colonial y se encuentra muy bien conservada, no es muy grande, con lo que en medio día o un día puede verse todo lo esencial. En primer lugar visitamos el Mausoleo del Che y después visitamos el famoso tren blindado que transportaba tropas y armamento para el ejército de batista y que los revolucionarios, encabezados por el Che, hicieron descarrilar para así conseguir armamento y hacerse más fuertes en su lucha contra el gobierno. El tren consta de 4 vagones a los que se puede acceder y en los que hay objetos e información del suceso. A continuación nos dirigimos al centro, donde comimos y terminamos nuestra visita dando un paseo por el Parque Leoncio Vidal.
Para visitar Santa Clara fuimos a pasar el día durante nuestra estancia en Trinidad, contratamos un taxi particular que nos gestionaron en el alojamiento, nos recogió por la mañana, nos llevó a la ciudad y una vez allí nos fue parando en los sitios más emblemáticos. También se puede visitar desde Cienfuegos en un día o parar de camino a la Habana o Varadero.
Cayo Coco y Cayo Guillermo
Los Cayos son uno de los grandes atractivos de Cuba, hay muchos para visitar según tu tiempo y ruta. Nosotras elegimos Cayo Coco y Cayo Guillermo, ya que por distancia y la dirección de nuestra ruta eran los que mejor nos pillaban.
En los Cayos hay complejos turísticos de diferentes estrellas que pertenecen al gobierno, es decir el único alojamiento disponible es este, no hay opciones de hostales o airbnb. Para llegar, hay que hacerlo también taxis oficiales (los negros y amarillos), un taxi particular o colectivo no tiene permitida la entrada a los cayos. Para que salga más económico, existe la opción de coger un taxi particular o colectivo que te lleve hasta el límite o frontera en el que comienza la zona del gobierno, una vez allí te bajas de ese taxi y coges uno de los oficiales que te llevará hasta tu hotel. Hacer todo el recorrido en taxi oficial es bastante caro. De nuevo, el trayecto te lo pueden gestionar en tu alojamiento como fue nuestro caso.

Pasamos 3 días en los cayos, en el paraíso caribeño que tiene kilómetros de arenas blancas y aguas transparentes. En primer lugar visitamos Cayo Coco, no alojamos en el Hotel Colonial, donde las habitaciones eran amplías, teníamos todo incluído, playa privada y piscina, como digo un paraíso. Pasamos allí una noche y al día siguiente fuimos a Cayo Guillermo con el autobús que hay disponible que va de un cayo a otro parando en los hoteles que hay de camino. Nos alojamos en Sercotel Club, de nuevo un gran complejo en el que teníamos todo incluído, picina y playa privada, las habitaciones eran algo más pequeñas que en el hotel anterior pero estaban bien. Cayo Guillermo era otro paraíso con grandes playas en las que estábamos prácticamente solas, pudimos ver flamencos en una ocasion (a lo lejos) y disfrutar de ese paraíso terrenal durante dos días.

Sin duda visitar los Cayos es toda una experiencia, sobretodo si disfrutáis de la playa, pero si me lo permites, me gustaría decirte que Cuba no es eso. Cuba no es sólo un lugar al que ir a un todo incluido a la playa, es un lugar para recorrer sus ciudades, conocer su historia y a su gente, un lugar en el que sumergirse en su cultura y disfrutarla, no verla desde la ventanilla de un coche clásico para meterse en un resort. Cada uno es libre de viajar como quiera, pero si sólo visitas el resort entonces te perderás la verdadera Cuba.
Varadero
Varadero lo visitamos de forma rápida porque no teníamos ya muchos días y nos habína comentado que era muy turísico, así decidimos pasar allí un día para verlo y los otros dos que nos quedaban pasarlos en la bonita Habana.

Salimos pronto de los Cayos y llegamos a Varadero a la hora de comer y obviamente lo primero que hicimos fue ir a la playa. Como no nos alojamos en resort, si no en una casa particular, fuimos a una playa normal, no una privada y la experiencia cambia bastante. Había muchísima gente y algunas partes de la playa no estaban muy cuidadas, disfrutamos del día pero no tuvo nada que ver con el resto de playas que visitamos. Por la tarde fuimos a dar un paseo por el Parque Josone que se encuentra en el centro, cenamos en un restaurante local y terminamos la noche visitando el Bar The Beatles, donde ponen música rock en directo y había bastante ambiente.
Como digo, hicimos una visita muy rápida y me consta que hay diferentes actividades que hacer desde Varadero en excursiones de un día y obviamente, ir a un resort también es una experiencia diferente en cuanto a la playa, pero la ciudad como tal, el ambiente y lo poco que vimos no me sorprendió mucho, me gustó mucho más cualquier otra ciudad de las que visitamos durante nuestra ruta. Al día siguiente pusimos rumbo a la Habana, donde pasaríamos los dos últimos días en este maravillosa isla visitando lo que nos quedó por ver en los primeros días. En este post tienes todos los detalles sobre que ver y hacer en la Habana y aquí una serie de consejos para tu visita e información sobre los decumentos necesarios para entrar al país.
Espero que disfrutes mucho gastándote los pies en Cuba, es un país muy especial, tiene algo que te llega y que hace que se convierta en un lugar inolvidable al que siempre se quiere volver. Como ya he dicho, vive Cuba, callejea, habla con la gente, baila y contágiate de la alegría que transmite ese país pese a las situaciones difíciles que vive, algo de lo que muchas veces todos deberíamos aprender.
2 comentarios sobre “Ruta de 2 semanas en Cuba”